La portada de mañana
Acceder
El ataque limitado de Israel a Irán rebaja el temor a una guerra total en Oriente Medio
El voto en Euskadi, municipio a municipio, desde 1980
Opinión - Vivir sobre un polvorín. Por Rosa María Artal

Contra la leche desnatada

Rioja2

0

Vistos los resultados de varias investigaciones, no parece que la cantidad de calcio o vitamina D en la dieta afecte a las probabilidades de desarrollar cáncer de próstata. No obstante, sí se observa un incremento de esta enfermedad asociado al consumo de leches descremadas. Lo dice la Revista Americana de Epidemiología.

Hasta hace poco se pensaba que el calcio que se consumía en la dieta, por ejemplo a través de productos lácteos, aumentaba las probabilidades de padecer cáncer de próstata, ya que estas sustancias afectan al metabolismo de la vitamina D. Varios estudios de amplio alcance han descartado que exista esa relación.

Dado que aún quedaban dudas sobre el asunto, un equipo de la Universidad de Hawaii (Estados Unidos) analizó una gran muestra de población, estudiando su evolución entre los años 1993 y 2002. En total, fueron 82.483 varones los que incluía el trabajo.

Los voluntarios respondieron a un cuestionario sobre consumo de alimentos y otros factores de riesgo que podrían distorsionar los resultados, como peso corporal, consumo de tabaco y nivel educativo.

En un periodo de ocho años, 4.404 de los sujetos desarrollaron cáncer de próstata. De nuevo, no había datos que indicaran que su consumo de calcio o vitamina D tuviera que ver con el proceso. Al repasar los datos de alimentación, tampoco se observaron efectos por el consumo de productos lácteos, pero sí se vio que entre el grupo de pacientes con cáncer el consumo de leche descremada o semidescremada era más frecuente. Los individuos que tomaban leche entera tenían menos riesgo que la media.

El otro trabajo similar, firmado por investigadores del Instituo Nacional de Salud, con sede en Bethesda (Estados Unidos), incluía aún más voluntarios: 293.888 en total. Su análisis va desde el año 1995 al 2001.

Las conclusiones son parecidas: a mayor consumo de leche desnatada, más riesgo de cáncer. La leche entera, de nuevo, parecía tener un efecto preventivo.

Etiquetas
stats