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Opinión - El problema de los tres gorros. Por Elisa Beni

Duro enfrentamiento en el último pleno del Congreso

Europa Press

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El último Pleno del Congreso de los Diputados de la legislatura, celebrado este miércoles, se convirtió en un campo de batalla entre el Gobierno y el principal partido de la oposición, el PP, a cuenta de los últimos asuntos que han causado polémica en España. La campaña de publicidad institucional del Ministerio de Industria, el consejo de comer conejo en Navidad, las propinas que dejan los españoles, los problemas económicos y, todo un clásico en los últimos cuatro años, la lucha antiterrorista, protagonizaron el 'rifirrafe' entre los escaños azules y la bancada popular en un Pleno en el que se notó el peso de las próximas elecciones generales de marzo.

Tras más de cuatro horas de debate parlamentario en torno al último Consejo Europeo, el líder del PP, Mariano Rajoy, abrió fuego esgrimiendo la subida de los precios en España “una vez y media más que el resto de la UE”, el “repunte” del euribor y la pérdida de poder adquisitivo para reprochar al Gobierno que no haya hecho reformas para evitarlo y que sólo haya dado “tres mensajes: que este es un proceso a largo plazo, que coman conejo y que es culpa suya por dejar propinar”. “¿Tiene algún mensaje para los españoles aparte de gastarse millones en una campaña de publicidad?”, inquirió.

“Sí, tres mensajes”, replicó el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. “Que el Gobierno es consciente de lo que representa el repunte de la inflación y la subida de precios; en segundo lugar, un mensaje de tranquilidad, y en tercer lugar, una explicación, se debe al alza del precio del petróleo y los cereales que se ha producido a nivel mundial”, señaló Zapatero, que quiso añadir a la lista un último “mensaje” para los españoles: “Que no se fíen de sus análisis y previsiones económicas, porque no ha dado una en los últimos cuatro años”.

En su réplica, Rajoy acusó al presidente de “culpar a la oposición para eludir sus responsabilidades” y aseguró que los precios del petróleo y los cereales “han subido en todo el mundo, pero es que en España los precios suben el doble”. “Merecería la pena gastarse menos dinero en publicidad y ocuparse de los problemas reales de la gente”, proclamó el líder del PP, que, tras reiterar las promesas electorales de su partido en torno a la economía, sentenció: “Su política económica no le ha ido bien a los españoles, llevamos tiempo advirtiéndolo y con publicidad y despilfarro no lo va a solucionar; culpando a la oposición, tampoco”.

Zapatero esgrimió en su defensa el “recuerdo” que los españoles tienen del Gobierno del PP, entre otras cosas, la congelación “del salario mínimo” y “un decretazo que costó una huelga general”. A continuación, el presidente se remitió a que durante su Gobierno “la renta disponible de los hogares ha aumentado un 24%”, que “como media” cada hogar “cuenta con 940 euros más al año”, consecuencia de que hay “tres millones más de trabajadores”, y que la “renta per cápita ha crecido más que en la anterior legislatura” y “supera en cinco puntos a la media europea”. “Esos son los datos y no las cosas que usted dice”, concluyó.

GANAR O NO GANAR

Por su parte, el secretario general del PP, Angel Acebes, hizo balance del Gobierno al cierre de legislatura. “Acaba con un ministro del Gobierno reprobado, la economía al borde de una grave crisis y el presidente es el único que no se ha enterado, acaba mendigando el voto de un tránsfuga desleal y acaba con el Gobierno despilfarrando en propaganda el dinero que hace tanta falta”, enumeró, señalando que con lo que se gasta el Ejecutivo en publicidad todos los días “se podrían comprar todos los días tres pisos para jóvenes”. “Y decían que esa campaña no acabará en los tribunales, sí que acabará porque la va a llevar el PP”, sentenció.

La vicepresidenta del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró que el Gobierno hace “un balance positivo” de la legislatura, que “empezó con 11 millones de apoyos, nunca antes tantos millones de personas habían respaldado un proyecto político”. “Y no hemos defraudado su confianza, hemos cumplidos nuestros compromisos”, aseguró De la Vega, que añadió que “lo hemos hecho” a pesar de que los populares “han preferido dedicar más esfuerzo a confrontar y crispar que apoyar al Gobierno para que prosperase el país”. “Pero sus intentos van a resultar vacíos, porque los ciudadanos saben que lo que han ustedes es poner palos en las ruedas del progreso de España”, zanjó.

En la réplica Acebes consideró que “el problema” es que al Gobierno “se le ha acabado el crédito y el tiempo”, al tiempo que consideró al Ejecutivo del PSOE “el peor Gobierno de la Historia de la Democracia”, por ello aseguró que el próximo Ejecutivo lo conformaron “los que nos ocupamos de bajar los impuestos, de los problemas de los ciudadanos y defendemos su libertad”. Sin embargo, a juicio de la vicepresidenta, el PP no ganará por ser incapaz de decir “ni una sola palabra en positivo”. “Es tan apocalíptico que nadie se lo cree. Algo habremos hecho bien, muchas cosas, y por eso vamos a volver a revalidar la confianza de los ciudadanos. Ustedes no van a ganar porque no se puede estar sin esperanza”, remachó De la Vega.

DE NUEVO EL TERRORISMO

El portavoz del PP, Eduardo Zaplana, atacó a la vicepresidenta recordando que el Gobierno “empezó la legislatura con mucho glamour, con las ministras posando con pieles en la revista 'Vogue' y acaban diciendo a los ciudadanos que por favor coman conejo”. “Los ciudadanos tienen el 9 de marzo la posibilidad de rebelarles y la van a aprovechar”, consideró el dirigente popular, al que De la Vega pidió que recuerde también “el codillo” que recomendó consumir la ex ministra Celia Villalobos. La vicepresidenta volvió a esgrimir en su defensa los “compromisos cumplidos”, a lo que añadió “lo dijimos y lo hicimos, a diferencia de usted, que no se lo cree nadie”.

Zaplana volvió a la carga en la réplica, señalando que el PSOE comenzó apoyado por 6 grupos parlamentarios “y mañana tienen que apoyarse en un tránsfuga” para aprobar los Presupuestos, “por no hablar de las soluciones habitacionales de los pisos de 30 metros” o cuando culparon “a los padres por la falta de nivel educativo de sus hijos”. “Y le estoy hablando de anécdotas”, dijo Zaplana, que como ejemplo de “tema trascendente” apuntó: “Cuando asumieron el Gobierno ETA estaba arrinconada y ahora es la que establece cuáles tienen que ser los trazados del AVE”.

Un argumento que la vicepresidenta utilizó para considerar que el PP “no tiene remedio”, porque “hasta el último día utiliza partidariamente el terrorismo”. “Es una vergüenza”, proclamó, acusando de nuevo al PP de “dedicarse a crispar, a obstaculizar, a oponerse a todo sin respeto a los ciudadanos y las instituciones”. “Por eso no les creen y por eso les suspenden, porque han hecho mal los deberes, por eso les van a dar una oportunidad, cuatro años para que repitan curso y puedan progresar adecuadamente”, ironizó De la Vega, que consideró que el PP “necesita cuatro años más de escuela de democracia, porque para gobernar les queda mucho”.

El último en responder a las críticas fue el vicepresidente Pedro Solbes, al que la diputada Fátima Báñez acusó de “cruzarse de brazos y jactarse de que la economía va bien”, cuando “su balance es nefasto”. “Se ha convertido en el vicepresidente del 'No' con mayúsculas, del no puedo, del no pasa nada y del no se enteran de nada”, le espetó antes de añadir que “los españoles harán con su dinero lo que quieran, comerán lo que quieran y dejarán las propinas que quieran”. El vicepresidente, tras exponer datos favorables al Gobierno, puso sobre la mesa dos sondeos de Antena 3 y Onda Cero sobre qué partido genera más confianza en materia de económica: “el PSOE 42,8%, el PP, 29%. Lo habremos hecho muy mal, pero estos son los resultados”.

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