El Congreso rechaza ilegalizar ANV y el PTCV

Menos de una semana ha durado la foto de unidad que se escenificó el pasado martes en la Puerta del Sol de Madrid con la concentración convocada por todos los partidos políticos y sindicatos contra ETA. El Partido Popular se volvió a quedar solo en el Congreso de los Diputados con otra propuesta sobre política antiterrorista en la que una vez más pedía, además de la no prescripción de los delitos de terrorismo, la ilegalización de ANV y del PCTV y la revocación de la resolución que la Cámara Baja aprobó en mayo de 2005 y que respalda al Gobierno para iniciar un proceso de diálogo con ETA en ausencia de violencia. Una iniciativa que fue calificada de electoralista por el resto de grupos y que forma parte de la “traca final de legislatura” del PP. Los populares, por su parte, lamentaron que no se aproveche esta oportunidad de “pasar de las palabras a los hechos y a concretar la unidad en la dirección inequívoca e inexorable de la derrota del terror”.

Era la cuarta vez que los populares presentaban una propuesta similar ante el Congreso de los Diputados y fue la cuarta vez que el resto de grupos les dio la espalda. La proposición no de ley del PP pedía la no prescripción de los delitos de terrorismo, y fue el propio Grupo Popular el que a última hora la enmendó para incluir sus dos peticiones estrella: la ilegalización del PCTV y de ANV y la revocación de la resolución de 2005.

Una propuesta que fue rechazada por 185 votos en contra, los del todos los grupos menos el PP, y 124 a favor, en una votación que escenificó lo efímero de la unidad promulgada por todos los partidos tras el último atentado de ETA el pasado 1 de diciembre en Francia donde la banda terrorista acabó con la vida de dos guardias civiles, Fernando Trapero y Raúl Centeno.

El encargado de defender la iniciativa popular fue el secretario ejecutivo de Libertades Públicas, Seguridad y Justicia del PP, Ignacio Astarloa, que destacó que con su propuesta pretenden dejar claras tres cosas: “que con los terroristas no se va a negociar nunca, que los terroristas no pueden ser alcaldes, diputados, ni concejales, ni financiarse con los impuestos y que no se va a seguir acomodando la ley a las circunstancias de la negociación con el terror”.

UNIDAD CON CONTENIDOS

Astarloa, que comenzó su intervención con un recuerdo para los dos guardias civiles asesinados por ETA, destacó que “la unidad” es “fundamental para derrotar a ETA” pero insistió en que esa unidad no debe ser “una expresión meramente retórica, vacía de contenido, un eslogan de ocasión o distracción, ni un lema para salir del paso”, sino que “exige medidas plenas de contenido, concretas y eficaces”. En este punto el diputado popular pidió “pasar de las palabras a los hechos” y “concretar la unidad en la dirección inequívoca e inexorable de la derrota del terror” en “la última ocasión de esta Legislatura para que los terroristas reciban un mensaje inequívoco” en este sentido.

Y para ello dos peticiones: la “clave de todo”, revocar “la autorización parlamentaria para negociar con los terroristas, aprobada, en mala hora, en mayo de 2005” y por otro lado que tanto el Fiscal como el Abogado del Estado pongan “hoy mismo sobre la mesa del Tribunal los abrumadores datos acumulados desde hace meses, años ya, sobre la fraudulenta continuidad de ETA-Batasuna por ANV y PCTV”.

Dos formaciones que, destacó Astarloa, “no han condenado tampoco los dos últimos asesinatos, dada su condición de instrumento político del terror, y a los que se ha permitido volver a las instituciones”. “Ir a unas elecciones con el Congreso de España manteniendo esa puerta abierta al diálogo con ETA sería el peor balance imaginable de esta Legislatura”, sentenció.

'TOTUM REVOLUTUM'

El diputado Juan Luis Rascón fue el encargado de participar en el debate por parte del PSOE y calificó la propuesta del PP de “totum revolutum” a modo de “traca final de legislatura”. El dirigente socialista denunció que los populares han usado el terrorismo “desde el primer minuto de la Legislatura para erosionar al Gobierno”, que es “lo peor que le puede pasar a una democracia”. Además destacó la enorme “deslealtad” en la que incurre el PP al fomentar con su actitud “la confrontación entre demócratas” que es la peor manera de honrar a las víctimas.

“Oportunista” y “electoralista” fueron los dos adjetivos que más se escucharon en las intervenciones de los portavoces del resto de grupos a la hora de referirse a la propuesta del PP. Así el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, cree que el PP “sólo aporta ruido” a la furia de ETA, pero avisó al Ejecutivo de que “hay que luchar contra la banda sin atajos, sin precipitación, pero, sobre todo, sin oportunismos”. Por su parte, Josep Maria Guinart, de CiU, se quejó de que el PP vuelva “erre que erre”, en su “obsesiva estrategia” de utilización de la política antiterrorista para poner en duda la labor del Gobierno en esta legislatura.

Mientras, las demás minorías coincidieron en criticar la iniciativa del PP, pero pusieron de manifiesto sus reparos a la Ley de Partidos. De este modo, la diputada del PNV Margarita Uría, recordó que su formación siempre se mostró contraria a esta normal al considerar que debe existir un “margen de actuación” para determinadas organizaciones políticas. También ERC, reiteró su rechazo a esta ley y defendió el diálogo como “esperanza” para la paz. Por último, por el Grupo Mixto, Begoña Lasagabaster (EA) puso de manifiesto su rechazo a que se cierren todas las puertas al diálogo sin violencia. “Para el PP, sólo hay unidad si los demás nos plegamos a sus postulados”, remachó Lasagabaster.