Avanza el proyecto para realizar aceras en la calle Prado Viejo y la Avenida de Burgos

Avanza el proyecto para realizar aceras en la calle Prado Viejo y la Avenida de Burgos

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La Junta de Gobierno Local ha aprobado este miércoles de forma inicial el proyecto de urbanización en calle Prado Viejo, vinculado al convenio urbanístico presentado por Inmuebles Moisela, S.L, propietaria del terreno.

El Ayuntamiento de Logroño ya adelantó la transformación urbana de la avenida de Burgos mediante la firma del convenio urbanístico entre el propio Consistorio, Inmuebles Moisela, Toybe y Constantia, que iniciará el desarrollo del PERI 43 (Prado Viejo II) y parte de los PERIs 45 (Prado Viejo III) y 27 (Calle Entrena).

A través de este convenio, los propietarios de los terrenos inician su proceso de transformación urbanística antes de que se cumplan los 24 años señalados en la delimitación de los diferentes PERIs.

Se trata del primer paso para organizar la transformación de esta zona de la ciudad hacia usos mayoritariamente residenciales, pero que también incluirán otros usos de carácter urbano y un aumento de los espacios públicos.

El acuerdo al que el Ayuntamiento de Logroño llegó con Inmuebles Moisela, propietaria del terreno, incluye una superficie que asciende a 60 000 metros cuadrados y que alberga completamente el PERI 43, una gran parte del PERI 45 y una pequeña porción del PERI 27, donde actualmente desarrollan su labor las empresas Toybe, Constantia y Amcor.

La empresa ejecutará la acera Este de la calle Prado Viejo, entre la avenida de Burgos y la calle Rodejón, que actualmente se encuentra sin urbanizar. De esta forma, la ciudad logrará una mejora importante para la movilidad peatonal en la zona al mejorar la conexión entre la avenida de Burgos con la calle Alfonso VI. Esta obra está valorada en 70 000 euros y el coste lo asume la empresa propietaria de los terrenos.

La propiedad y el equipo técnico municipal han trabajado de forma conjunta en el desarrollo del proyecto, que será sometido a información pública durante 20 días antes de su aprobación definitiva y que incluye una acera de tres metros de anchura con alumbrado y un carril bici segregado en lo que ahora mismo es el arcén.

Además, el acuerdo permite al Ayuntamiento de Logroño la ocupación anticipada de espacios de suelo para la mejora de aceras en la avenida de Burgos, junto a las instalaciones industriales.

El convenio firmado con la empresa permite que el Ayuntamiento pueda hacer mejoras para facilitar la movilidad peatonal en esa zona, ya que lograr la continuidad peatonal en las aceras de la avenida de Burgos es otro de los objetivos del Equipo de Gobierno que avanzan con este acuerdo.

Este proyecto supone el primer paso para la transformación urbanística de un área clave para conectar la zona del parque de San Miguel con la avenida de Burgos.

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