Rioja aprueba un rendimiento de producción del 90% en uva tinta para los próximos dos años

Rioja aprueba un rendimiento de producción del 90% en uva tinta para los próximos dos años

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El pleno del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada Rioja ha aprobado hoy un ajuste del rendimiento de producción del 90% en tinta y pide activar la vendimia en verde, tal y como ha informado su presidente, Fernando Ezquerro.

En rueda de prensa, Ezquerro ha dado a conocer una propuesta de acuerdo para lograr un “equilibrio” mostrándose “satisfecho”, dado que se ha producido con el acuerdo del “90% de la mesa después de un debate generoso” que, ha dicho, “refleja la preocupación del sector” y la “empatía” entre organizaciones.

Se trata de un Plan para la Recuperación del Equilibrio, una hoja de ruta bianual con la que se pretende actuar tanto en la oferta como en la demanda. Incluye la decisión de no solicitar un incremento de masa vegetal en los próximos tres años.

“Si no vendemos más el problema dejará de ser coyuntural”, ha dicho el presidente asegurando que “el sector está haciendo sacrificios grandes, reduciendo márgenes, producción y transformación”.

En esta línea, el pleno ha acordado un ajuste de los rendimientos de producción para las vendimias de 2023 y 2024, que será del 90% en el caso de la uva tinta, mientras que en el caso de la uva blanca se mantendrá en el 100%.

Se limita a un 4% la entrada de uva para vino de mesa, y al 69% el rendimiento de transformación, que en el caso concreto de la uva blanca destinada a la elaboración de vino blanco se establecer en el 70%

En esta línea, desde el Consejo Regulador se intensificará la labor de control sobre el viñedo y se solicitará a las comunidades autónomas la activación de la medida de 'vendimia en verde'.

Por otro lado, para la reducción de las existencias actuales de vino amparado se solicitará a las administraciones autonómicas la aplicación de ayudas prioritariamente para la destilación de vinos, con una prima mínima de ochenta céntimos por litro y, de forma subsidiaria, por la descalificación de vinos, con una prima mínima de sesenta céntimos por litro.

Desde el Consejo Regulador se ha trasladado que se ha hecho hincapié en este asunto durante la sesión plenaria, en la que han participado representantes del Gobierno de La Rioja, Gobierno vasco y de Navarra, quienes han mostrado “su disposición a estudiar medidas de apoyo al sector”.

El director general de la DOCa Rioja, José Luis Lapuente, a preguntas de los periodistas ha señalado que “la discusión de un eventual arranque no está sobre la mesa”. Ha insistido en que se “quiere actuar tanto desde la oferta como desde la demanda” y ha afirmado que “la clave de todo es dinamizar la venta”. “Ojalá se disparen las ventas y este escenario sea de un año”, ha aseverado.

UAGR en contra

La UAGR‐COAG ha votado en contra porque supondrán la entrada en bodega de más de 15 millones de kilos de uva para vino de mesa. Roberto Salinas Bezares, representante de la Unión, explica que “no se entiende esta permisividad en la producción de más uva destinada a vino de mesa, cuando por otro lado los viticultores tenemos que recortar nuestra producción para vino calificado como Rioja. El vino de mesa compite directamente con el amparado, pero es que además de él no se benefician todos los viticultores, ya que hay muchas bodegas que no permiten la entrada de ni un gramo de uva destinada a mesa”.

Por todo lo anterior, la UAGR‐COAG ha votado en contra de las normas de campaña, y alerta de las graves consecuencias que lo aprobado tendrá en el futuro: “Nosotros estábamos dispuestos a reducir un 90% nuestra producción si los elaboradores recortaban también la transformación por debajo del 70%, un 68% nos hubiera parecido adecuado, que es lo correspondiente al 10% de recorte en la viña. Pero la entrada de vino de mesa supone una línea roja que en la Unión no estamos dispuestos a traspasar”.

La Unión también lamenta la falta de autocrítica de las organizaciones que dominan la Denominación, al achacar exclusivamente a factores externos la actual situación excedentaria: “Las decisiones tomadas en las mesas del Consejo y de la Interprofesional por supuesto que han ayudado, de lo contrario no tendríamos tantos excedentes. Pero son muchos años ya con esfuerzo únicamente de los viticultores, sin reducción de la transformación uva/vino. Si durante las últimas cinco campañas se hubiera reducido tan solo un 1% el rendimiento de transformación de uva a vino, habría en el mercado 30 millones menos de litros de vino DOCa Rioja respecto a las existencias a enero de 2023”.

La valoración de ARAG-ASAJA

ARAG-ASAJA ha valorado acuerdo por el que las bodegas y cooperativas reducirán sus rendimientos de transformación durante los próximos dos años. El compromiso, aprobado en Pleno por el Consejo Regulador, se extiende también a limitar la entrada de vino de mesa a un máximo de un 4% en dos años y la paralización de plantaciones durante, al menos, un periodo de tres años.

La organización agraria apunta que así “los esfuerzos para recuperar el equilibro entre la oferta y demanda de la DOCa Rioja no recaigan solo en los viticultores, sino que las bodegas y cooperativas también hagan concesiones durante los próximos dos años”.

Para ARAG-ASAJA, el objetivo principal de este acuerdo, en un contexto de récord histórico de existencias en depósitos y barricas, y unas ventas penalizadas por la inflación, ha sido recuperar la “rentabilidad de los viticultores cuanto antes”, ya que de no haberse firmado “estaríamos hablando de unos rendimientos amparados de 100% en campo y 70% en bodega”, entre otras cuestiones.

Además, y a propuesta de la organización, este acuerdo será revisable si “la evolución de las ventas así como otros fenómenos climatológicos” favorecen que se consiga antes “el ansiado equilibrio entre la producción y las ventas”.

UPA tampoco apoya el acuerdo

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de La Rioja no apoya el acuerdo presentado esta mañana por parte del Consejo Regulador, ya que cree que traiciona a los viticultores de Rioja una vez más.

UPA Rioja considera que este acuerdo va a desequilibrar todavía más la balanza de la D.O.C.a. Rioja, puesto que propicia una mayor entrada de vino amparado en relación a lo que se vende. “Este acuerdo beneficia a unos pocos, mientras deja a muchos viticultores al borde del abismo, en manos de las posibles ayudas que ponga en marcha la administración”.

Desde UPA Rioja “llevamos meses demandando y trabajando con las administraciones medidas atractivas que favorezcan el equilibrio del sector, fundamentalmente vendimia en verde y destilación”, por lo que “creemos que el Consejo debe tomar decisiones relevantes determinantes”

Así mismo, considera negativo que se siga aprobando la entrada de uva destinada exclusivamente a producir vino de mesa y que siga siendo factor de negociación. De ahí que los esfuerzos en la reducción de rendimientos deberían ser “más responsables”. No se trata de un problema de ideas, sino de cifras.

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