El Diamante se estanca tras su brillante inicio

El Diamante atraviesa una situación complicada. No tanto por el puesto que ocupa, ya que el equipo está situado en la octava plaza, aún en posiciones de Copa, sino porque los resultados son peores de lo que, por juego, deberían. Cuchi Jiménez, entrenadora del Diamante, reconoce que “estamos un poco más abajo de lo que esperábamos”.

En cierto modo, el Diamante está traicionando alguna de sus señas más características. Ha dejado de utilizar Logroño como un fortín y eso le ha pasado factura ante rivales directos como Valladolid y Zaragoza. “En Logroño era donde tradicionalmente hacíamos nuestra temporada, pero esas dos derrotas nos han hecho mucho daño”, asegura Cuchi, que se lamenta de que “tenemos buenas sensaciones en el juego, pero la dinámica de resultados no es la correcta”. “Nos estamos estacando”, asegura.

El trabajo ahora es recuperar moralmente a unas jugadoras que controlan y hacen buen fútbol, pero a las que les falta ver puerta con más facilidad, “aprovechar mejor los contragolpes”. “Lo vimos en Navalcarnero. Controlamos la primera parte, pero nada más salir a la segunda nos metieron gol y vimos que haciendo sólo un buen trabajo no basta”, recuerda Cuchi.

Atrás el equipo se muestra sólido y lleva toda la temporada entre los menos goleados. “En defensa”, reconoce Cuchi, “no podemos mejorar mucho más, sólo se puede reducir lo mínimo porque el equipo está bien armado ahí”. “Ahora es cuestión de que las jugadoras sepan que su trabajo es bueno y conseguir que antes de Navidad el equipo vuelva a recuperar la buena línea de trabajo”, concluye Cuchi.