Bullock saca al Madrid de la mediocridad

El Real Madrid sumó su novena victoria consecutiva tras imponerse al Partizán Igokea por 75-64 en la cuarta jornada de Euroliga, en un partido donde bastaron dos triples consecutivos de Bullock y un par de acciones de Raúl López en el tercer cuarto para acabar con la amenaza serbia y seguir liderando el grupo C.

Este triunfo es el cuarto del Real Madrid en la máxima competición continental, en la que conoce sus partidos como victorias. Y es que Vistalegre no vivió el mejor choque de los suyos, pero tuvo como recompensa un enorme trabajo defensivo, que secó a Pekovic, el mejor de la Euroliga hasta el día de hoy, y regaló también un sabor dulce por volver a ver a un equipo que jugó como tal (todos los blancos anotaron).

Así, los pupilos de Plaza salieron con un objetivo claro: parar a Pekovic, la sensación de la Euroliga. El montenegrino, cuya voracidad no tiene límites bajo el aro, promedia en esta competición unas cifras espectaculares. 26,7 puntos, 8,3 rebotes, y poco menos de 35 de valoración. Este joven pívot tuvo en Vistalegre un mal día. Primero Hamilton y luego Papadopoulos se encargaron de estropear su bonito elenco estadístico, para suerte de los blancos.

Su primer intento de dos fue al hierro, buen presagio para los madrileños, que rápido se entonaron. Con las pérdidas de balón visitantes comenzó el recital habitual del Real Madrid ante un equipo que demostró que su capacidad anotadora sólo se llama Pekovic. Tras varios errores consecutivos de la estrella del Partizán, su entrenador, Dusko Vujosevic, le llevó al banco como 'castigo' y más, después de un triple de Charles Smith, que rompió por primera vez el duelo (15-4, min.7).

Por ello y tras la buena defensa individual planteada por el conjunto blanco, el primer cuarto acabó con dominio de los de casa (20-11). Sin embargo, el Partizán no se vino abajo, y después de la sequía de Pekovic, fue Novic Velickovic quién intentó tirar de los suyos. Y es que este equipo está muy acostumbrado a estas situaciones. La marcha, esta temporada, de Kosta Perovic a los Warriors de Golden State no ha impedido que estén cuajando un gran comienzo de campaña.

Con un bagaje pobre de los dos equipos en el segundo asalto, la batalla la volvió a ganar el Real Madrid. A pesar del desacierto generalizado, el tanteador se mantuvo 33-21. Las medallas en este periodo correspondieron a Lazaros Papadopoulos, que anotó los tres tiros de campo que dispuso. El griego demostró que no es un jugador egoísta y provocó el aplauso del Palacio de Vistalegre en varias ocasiones.

MARAVILLA BULLOCK

El estadounidense Louis Bullock fue quién sacó al Real Madrid de la mediocridad gracias a dos triples consecutivos. Las dos canastas de 'Sweet Lou' pusieron las cosas mucho más claras, y el conjunto merengue jugó más cómodo (48-30, min.25). La presión en su pintura no dejó de existir, y aunque la ventaja era suficiente los de Plaza siguieron trabajando.

A la tranquilidad de Bullock, que remató a los serbios, se unió la chispa de Raúl López, hasta el momento desaparecido. El base catalán logró enebrar un par de pases por el ojo de la aguja y una cabalgada desde su propia zona sirvieron para que su entrenador no le moviera del parqué carabanchelero en todo el tercer cuarto, que acabó con un tanteo de 59-42.

El último cuarto no aportó nada positivo a los de casa. Pelekanos, que contó con más minutos, no acertó desde el perímetro y el Partizán se dedicó a contraatacar a los blancos, que ya sabían de su victoria a falta de varios minutos para el final.

Los de Vujosevic cerraron el encuentro con un sensación de que si hubieran aprovechado la versatilidad de sus jugadores habrían podido sacar algo positivo de la capital de España. Lo mejor para el Real Madrid fue que se acabó el encuentro, por suerte con un triple de ocho metros, más adicional de Bullock.