Jesús Vicente Aguirre calcula en 2.000 los asesinatos de la posguerra en La Rioja

El escritor Jesús Vicente Aguirre ha contabilizado alrededor de dos mil asesinatos en La Rioja durante la represión que siguió a la Guerra Civil, la mayoría de ellos ejecutados en cunetas de caminos y carreteras.

Aguirre presentará en las próximas semanas un libro en el que ha trabajado en los últimos cinco años, en los que ha recorrido todos los pueblos riojanos “que estaban en una zona de retaguardia” en busca de los datos de personas asesinadas tras la Guerra Civil “por su militancia política o sólo por defender una idea democrática”.

El autor dio algunos detalles de su libro poco antes de pronunciar la conferencia “De las cunetas al Parlamento”, en la Universidad de La Rioja, dentro del seminario “Historia Abierta”. Pretende que el libro sea “una aproximación al genocidio en La Rioja, a la memoria histórica de nuestro propio entorno, para tratar de cerrar heridas”.

En él repasará muchos de los cerca de 2.000 asesinatos ocurridos en La Rioja -400 de ellos en el paraje llamado “La Barranca”, en Lardero, cerca de Logroño-, con unas 1.500 fotografías y testimonios de testigos y familiares, entre otros documentos.

“Es una realidad dura que debemos conocer, ser conscientes de dónde partimos para no repetirlo”, considera Aguirre, quien calificó de “un paso adelante” la Ley de Memoria Histórica nacional, para la que las críticas “sólo pueden venir de personas que no conocen este tema o que están manipulados por ideas políticas”.

Así, prosigue, “es cierto que hubo asesinatos en los dos bandos” aunque “lo evidente” es “la diferencia de trato” ya que “unos subieron -sus nombres- a las paredes de las iglesias y otros quedaron en las cunetas y con sus familias humilladas”.

Por ello cree “incontestable” que las familias de los dos mil asesinados pretendan darles “un entierro decente” algo que “no sé cómo alguien puede pensar que es buscar revancha”. El título de su conferencia alude al Parlamento de La Rioja porque el año pasado esta Cámara aprobó por unanimidad una declaración institucional de reconocimiento a las “víctimas del odio” de hace 70 años.

Un “gesto”, reclama el autor riojano, debe tener continuidad “porque hay muchas cunetas que desenterrar en La Rioja” y “ojalá ahora las familias quieren hacer más cosas como las de los últimos años” en municipios como Viguera o Sajazarra “en donde, por cierto, esos actos han unido más a la gente del pueblo”.