Necesidades especiales de los niños trasplantados

Aunque ya se sabía que los pacientes pediátricos trasplantados pueden experimentar alguna dificultad, los factores de riesgo de los problemas de aprendizaje estaban por determinar. Un nuevo estudio presentado en el Congreso Americano de Enfermedades del Hígado intenta paliar esta carencia. Según la investigadora Susan Gilmour, “cuando se aconseja a los padres se habla de que los trasplantes salvan la vida del niño pero, además, las familias queiren saber cómo ayudar a los pacientes después del procedimiento, y hay muy pocos estudios en este campo”.

En su trabajo, el equipo que dirige Gilmour incluye información proporcionada por los padres de 636 niños de edades comprendidas entre los 5 y los 19 años, todos ellos pacientes trasplantados. Se dividieron las respuestas según la edad de los niños y el momento en el cual habían pasado por quirófano.

El cuarenta por ciento de los chavales recibían clases de apoyo para alcanzar el nivel medio de rendimiento escolar. También se observó que estos niños tienen un riesgo mayor de desarrollar discapacidad psíquica o trastorno de aprendizaje serio.

Gilmour, aunque no está sorprendida por los resultados, sí se declara “preocupada por la autoestima de los niños después del trasplante”. Considera que es importante que se defina el problema con precisión “para encontrar medidas que mejoren la situación antes y después del trasplante”. A su modo de ver, “existen recursos educativos a los que podemos recurrir, pero hace falta identificar a los niños que los necesitan y proporcionárselos”.