Estudiantes de la EBAU denuncian desigualdades en las correcciones

Un grupo de estudiantes de 2º de Bachillerato en el curso 2020-2021 que acaban de realizar la EBAU han comenzado una recogida de firmas para reclamar tener acceso a los exámenes y su corrección, ya que creen que ha habido grandes diferencias en función del corrector que les ha corregido. Son estudiantes de distintos municipios como Logroño, Arnedo, Haro y Calahorra.

Explican en change.org que “tras recibir las calificaciones el descontento es generalizado, no es solo enfado y decepción lo que sentimos, si no también gran pesadumbre por la injusticia y el desamparo que padecemos en un momento tan determinante para nuestro futuro”.

Aseguran que estudiantes con buenas notas “han obtenido calificaciones poco proporcionadas a lo esperado y merecido en casi todas las materias. ¿Esto ha de significar un fracaso del sistema educativo o un grave problema en la corrección?”.

En cuanto a las notas obtenidas, creen que “son especialmente cuestionables, por ejemplo, las de Historia de España, no solo porque gente (sobre todo de los examinados en Logroño) con muy buenas notas durante el curso hayamos obtenido calificaciones de menos de 6 habiendo salido del examen con muy buenas impresiones, sino también porque da la sensación de que ha habido notas muy dispares, teniendo en cuenta los correctores, algo que nos parece inaceptable, máxime cuando deben existir unas rúbricas y criterios de evaluación (a los que no tenemos acceso) para poder prepararnos y contrastar nuestra ejecución. Es muy frustrante ver cómo las cosas no cuadran”.

A pesar de que este año se han producido cambios en algunos examinadores, no entienden la forma y nivel de algunas de las pruebas y citan como ejemplo Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales, “examen en el que apenas si había dos ejercicios que seguían el modelo de los exámenes de años anteriores; también el ya sonado caso del examen de Inglés, que a todos nos pareció extraño e incluso no adecuado al nivel que se supone para esta prueba”.

Debido a las especiales condiciones de la pandemia, este año los exámenes de la EBAU eran más flexibles, pero creen que este “beneficio” se contrarresta de nuevo “por una corrección tan a la baja en muchos casos”.

Tal como funcionan los tribunales de la EBAU, “si hacemos una reclamación individual como tendría que ser, sabemos que es altamente improbable que sea atendida a tiempo para llegar a las primeras fases de matriculación de las diferentes universidades. Además, la revisión es tremendamente injusta porque no podemos ver nuestros exámenes (lo que tendría que ser un derecho) y la nota final no es la que realmente correspondería tras la revisión, sino la media entre la ya publicada y la resultante de la revisión”.

También les parecen “sorprendentemente desagradables” las diferencias en la corrección y la correlación entre las calificaciones del curso y de la EBAU. “Muestra de ello es que compañeros de clase con resultados similares durante el curso hemos obtenido calificaciones muy diferentes en función del corrector asignado. Algo que tampoco nos parece bien es que durante la mayoría de la realización de los exámenes no se encontrase presente ningún profesor experto en la materia, cuando es algo manifiesto en las bases”.

Todo esto sitúa a los estudiantes de La Rioja “en una situación de clara desventaja respecto a otras comunidades y es a vista de todos: injusto”.

Por todo ello solicitan públicamente tener acceso para ver los exámenes y su corrección, sin que esto signifique que se deban evaluar de nuevo y piden que haya “un modelo de corrección realmente igualitario al menos para toda La Rioja (ya que está visto que para toda España es imposible) y que sea conocido por todos los institutos y estudiantes”.

El sentimiento colectivo en estos momentos, explican, “es de esfuerzo no recompensado y frustración académica, así como una gran solidaridad y unidad entre estudiantes de 2º de Bachillerato ante la injusticia de que un examen valga más que el esfuerzo de toda la vida”.