Los vecinos de El Campillo señalan la falta de servicios como el mayor problema de su barrio

En agosto de 2017, fruto de la inquietud de los vecinos por hacer oír sus demandas en las distintas instituciones de la ciudad de Logroño, se creó la Asociación de Vecinos 'El Campillo'. Una de las actuaciones que ha realizado desde entonces ha sido la realización de una encuesta periódica entre sus socios para valorar los temas que más les preocupan y trasladarlos a las distintas Administraciones en busca de una solución.

Hace unas semanas se realizó dicha encuesta, pudiendo comprobar sus resultados con los de la encuesta realizada en 2018 y observar su evolución. Las conclusiones a las que han llegado con este estudio son las siguientes:

Las principales reivindicaciones y preocupaciones de los vecinos no han variado, principalmente por la falta de inversiones en el barrio desde su construcción hace 14 años. En los últimos años solo se ha conseguido algún paso de peatones, la modificación del itinerario del “Búho” para que entre al barrio y el compromiso para modificar las líneas 9 y 3.

En la encuesta, la primera demanda se centra en la falta de servicios en el barrio, pidiendo la implantación de un supermercado y una farmacia. Esta demanda ha encontrado una especial relevancia en el momento actual, en el que la restricción de la movilidad obliga a los vecinos a desplazarse a otros barrios para cubrir sus necesidades básicas, ocasionando un gran trastorno.

La falta de servicios también se pone de manifiesto, según la Asociación vecinal, “con la petición al Ayuntamiento de un plan de incentivos general para la implantación de nuevos negocios o la petición para que el IRVI ofrezca en condiciones especiales a emprendedores sus lonjas, que llevan vacías desde su construcción”.

También se mantiene la preocupación por la limpieza y mantenimiento del barrio, tanto en relación al desbroce y vallado de las numerosas parcelas. “Pese a la multitud de reclamaciones realizadas a lo largo de estos años, no vemos una voluntad real de cumplir en tiempo las propias normativas municipales”, protestan desde la Asociación.

El tercer gran punto de preocupación tiene que ver con la mejora de servicios para los más pequeños, en un barrio de familias jóvenes con hijos. Los vecinos solicitan la mejora de los dos parques infantiles del barrio, ya que no tienen abrigo para el invierno ni sombra para el verano, por lo que durante gran parte del año no pueden ser utilizados. Además, reclaman zonas de juego específicas para niños entre 8 y 15 años, pues ambos parques son para niños más pequeños. Por ello, piden que se instale una ludoteca o centro cívico para centralizar las actividades para los jóvenes, como podría ser un punto de lectura con conexión a Internet. Con ello, aseguran, evitarían los desplazamientos diarios a otros puntos de la ciudad para realizar las actividades de ocio.

Merecen mención aparte las dos reivindicaciones históricas del barrio junto con la ludoteca, como son el centro de salud y el colegio. Si no están entre los primeros puestos (se sitúan en séptimo y décimotercer lugar, respectivamente) es porque “los vecinos son conscientes de que en la actualidad son demandas que no van a ser atendidas a corto plazo, aunque no por ello renunciamos a las mismas”.

Por último, también aparecen demandas menos importantes, como los problemas de seguridad por la ocupación de Extrapiel, los problemas de ruidos por el MUWI o los ensayos de cofradías, y otras reivindicaciones como son la mejora de la zona de esparcimiento canino o el alquiler de bicicletas.