Carmen Madreñarroja y Natalia Suarez, protagonistas de la quinta edición de 'Enverarte'

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La quinta edición del proyecto artístico Enverarte de Ábalos contará este año con la participación de dos artistas, Carmen Madreñarroja y Natalia Suarez, que desarrollarán un trabajo específico para esta edición, que consistirá en una instalación artística cargada de creatividad, con la madera y la lana como protagonistas.

Madreñarroja realizará el montaje de su instalación el sábado 17 de agosto, y Suárez lo hará la primera semana de septiembre. Juntas compondrán un espacio que podrá disfrutarse durante la Jornada de puertas abiertas, el sábado 7 de septiembre.

Carmen Madreñarroja y Natalia Suárez, con diferentes intenciones, objetivos y praxis artística, son “guardianas de un tiempo pasado, pero no encapsulado sino reinterpretado desde el presente”.

Ambas, son artistas coherentes en su relación con el medio en el que viven y desarrollan su trabajo, desde una situación completamente contemporánea, a pesar de que el proyecto “no quiere entender de dicotomías como rural frente a urbano, sino de maneras de vivir y relacionarse con nuestro entorno, dando valor al patrimonio material e inmaterial y construyendo un nuevo paisaje contemporáneo en el que creación artística y naturaleza se fundan para el disfrute de los que lo contemplan”.

Los artistas invitados a participar realizan un trabajo procesual y especifico, que se visualizará y materializará en las jornadas, en distintos emplazamientos, estableciendo nuevas relaciones e interpretaciones con los participantes. Desde la organización han querido “destacar también su trabajo e implicación, que incluyen a Ábalos en sus procesos creativos, con trabajos específicos que muestran un afán personal y profesional que nos indica su interés por buscar y trabajar en nuevos contextos, incluso abrir caminos donde no existen”.

Las artistas, al detalle

Carmen Madreñaroja, creadora del proyecto Arte Vegetal en la localidad de Salientes, en el Alto Sil leonés, trabaja en la naturaleza y realizará una intervención donde el material será la lana, dentro del proyecto 'La huella de los rebaños' que la artista lleva a cabo en distintos puntos de España desde hace diez años para “reivindicar la importancia y el valor de la trashumancia, así como la riqueza experiencial y científica de las culturas humanas en torno a ella”. La propuesta, en su instalación se relaciona directamente con el vino y también recupera un fragmento de historia común, el pasado inmediato de los rebaños, que en Ábalos, como en tantos lugares de ésta y de otras geografías, han dejado de marcar horarios con su paso. La obra estará elaborada con lana de oveja de La Sonriera Riojana, ya que uno de los objetivos del proyecto es utilizar los materiales propios de cada entorno.

En La segunda edición de la Biennal de Land Art de Andorra, Carmen pudo aprovecharse de la presencia de un manantial de aguas termales en la zona. Quizá en Ábalos sea el vino en el procesado del material. “Me vino genial porque pude hacer algo parecido a fieltro”, explicó la artista, cuyo proyecto la ha llevado a visitar otras provincias españolas como Toledo, Cáceres, Zamora, Salamanca, Burgos y Huesca, probando lanas diferentes, pero escuchando historias parecidas sobre la pérdida de valor de la lana desde hace bastantes años ya, y haciendo con ese material huellas que se funden con el entorno, dejando testimonio de lo humano, ya que sin pastores ni hubo ni habrá jamás rebaños. El proyecto también quiere contribuir a la difusión de los objetivos de la Declaración de los pastores nómadas y trashumantes, firmada en Segovia en el año 2007

De la contracción de madera y cerámica, nace el nombre de WOODIC, sello bajo el que trabaja como diseñadora en cerámica, Natalia Suárez. En su práctica creativa integra las nuevas tecnologías con los procesos artesanales en una apuesta por diseños honestos basados en el imaginario femenino, la mitología y las formas de la naturaleza. En sus piezas combina materias primas nobles, como la madera, el oro y la arcilla. Licenciada en Bellas Artes en la especialidad Diseño por la Universidad de Barcelona y graduada superior en Ceramica Artísica por la Escuela de Artes y Oficios de Barcelona, Llotja, San Andreu. En Enverarte, Natalia activará nuestra memoria con su potente iconografía en relación con el espacio y su propia narración. Asi define la pieza titulada Conejera en «Memoria, espacio íntimo» - II Encuentro de Creación Contemporánea y Medio Rural San Román de Candamo (Asturias) - que se formalizó en un espacio que dejó de usarse hace tiempo como conejera. “Un conjunto de imágenes, hechos o situaciones pasadas son retenidos, configuran nuestra memoria, nos cuentan de nuestros hábitos, costumbres, de donde crecimos, de lo que vimos, de lo que vivimos. Tejen un hilo de conexión con presente y futuro y nos cuentan quienes fuimos.A este espacio vuelven en silencio, a recordarnos el uso de los lugares, por los que antes aquí laboraban, en su cotidianidad.”

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