Cristina Forner, una de las pocas mujeres que mandan en el mundo del vino

Criada en Francia, donde estudió Empresariales y Enología, llegó a La Rioja con 30 años para hacerse cargo de la bodega familiar. Hoy Cristina Forner es una de las mujeres más destacadas del mundo del vino y su experiencia al frente de Marqués de Cáceres ha sido recogida en un artículo de Expansión.

Forner es la la cuarta generación de la familia en el sector del vino. Sus abuelos se exiliaron en Francia durante la Guerra Civil. Su padre tenía viñedos en Burdeos y a finales de los años 60 creó una bodega en Cenicero para producir un vino similar al que estaba haciendo en Francia, “con menos sabor a madera, nuevas técnicas de cultivo y utilizando barricas de roble francés”.

Un amigo, el Marqués de Cáceres, “le sugirió llamar a la bodega con su nombre y él aceptó”. Fue en 2007, en plena crisis, cuando Cristina Forner cambió París por Logroño para hacerse cargo del negocio familiar, mientras su hermano se ocupaba de la bodega de Burdeos. Decidió no competir en precio y apostar por crear nuevos productos, más selectos. Además, ahora han comenzado a diversificar y elaboran también Rueda, Albariño, cava...

Forner defiende que hay que beber menos, pero beber mejor. “Sobra vino del montón”, subraya. Esta enóloga cree que “debemos ser capaces de transmitir a los Mmllennials que el vino no es una industria, sino algo artesano, parte de nuestra cultura, con tradición, y que se recomienda en la dieta mediterránea”. De hecho, ella reconoce que se toma un par de copas de vino cada día.

Cada vez hay más mujeres al frente de bodegas y más sumilleres y Cristina Forner es un ejemplo para todas ellas. Recientemente se ha convertido en la sido la segunda mujer en ser reconocida por Los Caballeros del Vino, una organización que premia a las personalidades que apoyan el vino español en Reino Unido.