Ernesto Tubía, un técnico de laboratorio con 220 premios literarios

Su nombre es Ernesto Tubía. Se gana la vida como técnico de laboratorio de calidad en una empresa de barnices y en sus ratos libres escribe. Una afición que, de momento, le ha llevado a ganar más de 210 premios literarios en tan sólo diez años. Posiblemente sea el escritor de La Rioja con más premios en su biografía, aunque como él mismo reconoce, “escribo porque me gusta, si no hubiera ganado ninguno, seguiría escribiendo”.

“Cuando se es un lector tan precoz, escribir es el siguiente paso”

Y es que Tubía es un apasionado de la lectura. Su familia regentó un kiosco en Haro durante 50 años y ese era el lugar en el que pasaba los fines de semana. “Mis sábados y domingos los pasaba con mi abuela entre periódicos y cómics”. Fue en el kiosco donde empezó a leer. “Empecé a leer muy temprano, de hecho cuando mis compañeros de clase sólo deletreaban, yo ya leía cómics... y me imagino que cuando se es un lector tan precoz, escribir es el siguiente paso”.

Paso que Tubía ha dado y, visto lo visto, con gran éxito. De hecho se dice de él que “se ha consolidado como uno de los más prolíficos escritores de relato corto y uno de los que más premios cuenta en su haber dentro del literario español”. Relatos en los que intenta “saltar de un género a otro” aunque confiesa estar muy influenciado por Edgar Allan Poe, Stephen King, Murakami.

Enfrentarse al folio en blanco o a la pantalla del ordenador, no es un problema para este escritor porque como reconoce, “las historias están en todos los sitios”. Nunca sabes de dónde puede surgir una historia, apunta, “las hay que salen de una conversación en un bar, de un miedo, de un fantasma, de un error... al final, las historia pueden salir de todos los sitios, por supuesto leyendo también a otros autores...”.

Y así, buscando historias, Ernesto Tubía lleva diez años y unos 220 premios. Para alimentar esta afición, este escritor intenta arañar tiempo siempre que su día a día se lo permite. “Aprovecho para escribir cuando mis hijos se echan la siesta, cuando se meten a la cama... ”, hoy por ejemplo, cuenta, “tengo el día libre y después de esta entrevista me iré a casa, me pondré música y a escribir...”. Acaba de terminar un un relato navideño “y ahora estoy con una novela aunque la tengo un poco parada” porque lo suyo son los relatos cortos, “de entre 5 y 40 páginas”.

El primero, el Certamen de San Felices de Bilibio de Haro

Y fue con uno de estos relatos cortos con los que ganó el primer premio. “Fue mi mujer la que me animó a presentarme a concursos”. Y así fue como se estrenó como ganador en el Certamen de San Felices de Bilibio de Haro, su pueblo natal. Después vendrían otros premios nacionales y de otras comunidades autónomas, “el primer año gané tres premios, el segundo diez, el tercer año 15... este año 2018 ya llevo ganados 34”. Y así hasta más 210.

Si se tuviera que quedar con alguno, Ernesto Tubía lo tiene claro. “El primero, por ser el del pueblo en el que nací y, a nivel nacional, el Certamen de Novela Corta José Lusi Castillo Puche y el Princesa Galiana por la proyección que suponen estos premios pero, sinceramente, los que más ilusión me hacen son los de aquí, los de La Rioja como el Esteban Manuel de Villegas de Nájera que lo he ganado dos veces, el Manuel Bretón de los Herreros de Quel que he ganado cinco veces o cuando me concedieron el Letras Riojanas... los de aquí son muy especiales”.

Un año muy especial plagado de premios literarios que que terminará con publicación de su séptima novela en papel, 'Octubre' por una editorial riojana. Y mientras tanto y hasta que 'Octubre' esté en las librerías, Tubía sigue recibiendo premios. De hecho, este mismo sábado seguirá con su peculiar “peregrinaje literario” porque como él mismo reconoce, “este año 2018 no para de darme satisfacciones”.

Y mientras tanto, mientras llega la su primera novela en papel, Tubía sigue recibiendo premios. De hecho, este mismo sábado seguirá con su peculiar “peregrinaje literario” porque como él mismo reconoce, “este año 2018 no para de darme satisfacciones”.