El vacío del mano a mano

En la cuarta de feria se han lidiado dos toros de José Vázquez 1º y 2º, dos de Zalduendo 4º y 5º, y dos de Garcigrande 3º y 6º, todos mal presentados y de peor juego, siendo todos procedencia Domecq y protestados todos de salida para “El Juli” oreja, silencio y palmitas y Diego Urdiales, ovación, silencio y oreja, de sobresaliente actuó Miguel Ángel Sánchez.

El Juli, en el que rompía la tarde saludó con unas verónicas ganándole el terreno para rematar con media, con la muleta toreó en redondo por el derecho templadito sacando alguna tandita de naturales, tras el manejo de los aceros cortó una oreja. En el tercero manejó con gracejo el capote, realizó unas chicuelinas que animaron las gradas y con la muleta le sacó todo lo que poseía el flojo y descastado burel, con los aceros un sainete, silencio. En el quinto de la tarde se dice que no hay malo, pues otro descastado y sin trasmisión, lo mejor que el coletudo abrevió, palmitas.

Urdiales, en el segundo de la tarde realizó una faena fue de menos a más. Lo toreó por ambos pitones con torería y firmeza sacando una tanda buena de naturales ya que el público estaba a favor del arnedano. Perdió mayor trofeo por el mal manejo de los aceros escuchado dos avisos, ovación. El cuarto de la tarde, un burel con el que no llegó a acoplarse ya que era otro descastado y él abrevió, tras la estocada silenciado y pitado en el arrastre el toeo. En el que cerró la tarde, lanceó por verónicas rematadas con una media, tras la caricatura de las varas le recetó unas chicuelinas que encandilaron al respetable, toreó con más voluntad en sacar lo mejor del astado, tras una estocada caidilla oreja que paseó, el astado pitado en el arrastre.

Lo mejor de la tarde el par que puso Iván García al quinto de la tarde, todo lo demás cayó en el más absoluto vacío.

Un despropósito de tarde que se veía desde la misma presentación de los carteles.