Falsos autónomos también en La Rioja, ¿una figura en auge?

La Inspección de Trabajo ha denunciado en el Congreso de los Diputados un “fraude masivo de diversas modalidades” a la seguridad social, y contra los derechos de los trabajadores, con los “falsos autónomos”.

Empleados obligados a hacerse autónomos

Es el caso de Martín. Trabaja en una oficina como el resto de sus compañeros. Unos son trabajadores por cuenta ajena, y otros como él, por cuenta propia. Son también, falsos autónomos. Es decir, explica Expansión, son empleados obligados a hacerse autónomos para que la empresa no pague la Seguridad Social. Son trabajadores que no están en la plantilla de la compañía pero que operan como asalariados suyos, con una disciplina, horarios, jornadas y cometidos.

O dicho de otra manera, no existe una relación laboral estricta entre la empresa y trabajador sino que muchas veces es un contrato mercantil. El trabajador autónomo que en la práctica opera como un asalariado, factura a la empresa con la que trabaja. Incluso, muchas de estas relaciones han terminado convirtiendo al empleado en un trabajador autónomo dependiente económicamente. Es decir lo que en la jerga del mundo del trabajo se conoce por su siglas como trade. Aquellos que reciben al menos el 75% de sus ingresos de trabajar con una sola empresa.

Eduardo Fernández es el secretario general de la Federación de Empresarios de La Rioja y explica a Rioja2 que “en la FER y en la Asociación de Autónomos de La Rioja CEAT defendemos el uso adecuado de la figura del autónomo”. Y es que, explica, “el autónomo es un profesional, un empresario que, por su cuenta y riesgo, ejerce una actividad económica por lo que siempre defenderemos el uso de esta figura dentro del marco de la legalidad”.

Y es que muchas empresas 'utilizan' la figura del 'falso autónomo' para ahorrarse los costes de la Seguridad Social y salariales además de poder prescindir de ellos con mayor facilidad que de los asalariados. Sin embargo desde la FER insisten en el estricto cumplimiento de la legalidad. “La FER y CEAT siempre defienden la legalidad vigente”, apunta Fernández.

De hecho puntualiza que “la figura del falso autónomo tiene todos los inconvenientes porque no es una figura legal y, por lo tanto, no debe ser utilizada”. Por todo ello, asevera, “debemos defender la figura del autónomo como empresario, facilitar su tarea y su actividad, y para ello es necesario reducir la enorme burocracia y el papeleo, luchar de forma activa contra la competencia desleal. En definitiva se trata de defender su posición como generador de riqueza y empleo siempre dentro de la legalidad”.

Y, por estar razón, Fernández rechaza las tesis de que diversas medidas implantadas para fomentar el autoempleo contribuyan a la proliferación de estos 'falsos autónomos'. “La tarifa plana busca que personas con un proyecto empresarial reciban un incentivo y tengan un estímulo con el menor coste en la primera temporada de su actividad, en la que los gastos y la inversión son mayores y pueden llevar consigo un revés en su economía. Y la tarifa plana también es una importante herramienta para favorecer la legalidad. Que el autónomo realice la actividad dentro de la legalidad y no en la economía sumergida”.

El falso autónomo es una realidad

Sin embargo el 'falso autónomo' es una realidad que está ahí. De hecho, según la Federación de Trabajadores Autónomos ATA y UPTA, en España hay unos 300.000 trades. Sin embargo la Seguridad Social sólo tiene adscritos a 10.000. Y, sobre todo, los 'falsos autónomos' son más habituales en las cooperativas, las clínicas, el transporte, las distribuidoras de comida a domicilio, las industrias cárnicas, la construcción, las empresas de servicios a otras empresas y los medios de comunicación.

Razones por la que ATA ha propuesto que se cree un registro obligatorio donde figuren los trades y las empresas que los contraten.