La primera casa rural de España que admite el pago con bitcoins está en La Rioja

Parece que 2018 será el año en que la criptomoneda dejará de ser una reserva de valores, un método de inversión, para pasar a convertirse en una forma de pago más, en una moneda de transacciones comerciales. Con esa perspectiva algunos establecimientos han comenzado ya a prepararse para cuando llegue el momento. 

Es el caso de la Casa Rural El Olmo de El Rasillo, el primer establecimiento rural de España que admite el pago con criptomoneda. "Nos lo comentó un amigo hace un año y medio y comenzamos a informarnos. Hace meses que lo incluimos como método de pago en nuestra página web y, en los últimos tiempos, hemos notado que los clientes empiezan a interesarse, preguntan y se muestran mucho más dispuestos", explica Cristian Aser Hernández. 

Un gimnasio, primer establecimiento de Logroño que admite bitcoins

Según los propietarios del establecimiento, "hasta el pasado verano todo esto sonaba a chino pero, a raíz de entrar en el tema grandes empresas como el Santander, el BBVA o IBM, se ha empezado a hablar mucho más y a generar mayor confianza, cuando el pago con bitcoin se popularice en marcas como Amazon o Apple, se extenderá seguro como la espuma". 

Contratos inteligentes

Y es que los defensores de la criptomoneda lo tienen muy claro: las ventajas son incomparables. Por un lado, se puede pagar directamente, sin ningún tipo de intermediarios, sin depender de autorizaciones o comisiones del banco emisor o del receptor. 

Además, detrás de cada criptomoneda hay un contrato inteligente. "Si por ejemplo en mi establecimiento reservas una habitación con bañera de hidromasaje y cuando llegas hay una bañera normal, se está incumpliendo una parte del contrato y, por lo tanto, el dinero se reembolsa inmediatamente al cliente sin que nosotros podamos hacer nada al respecto", explican desde la Casa Rural El Olmo. 

Otra de las ventajas es el anonimato de una de las partes. En el caso de otro tipo de productos, esto puede ser un importante aliciente ya que puedes comprar un producto sin que el vendedor tenga ningún dato personal tuyo. 

El avance del bitcoin parece imparable.