Cambios en Ibercaja: nuevo director y oficina de empresas en El Espolón

El, hasta ahora, director territorial de Ibercaja en La Rioja, José Luis Ollero, ha explicado hoy los últimos cierres de oficina producidos en Logroño como un “cambio de modelo” para ajustarse a los “hábitos del cliente”.

Ollero ha ofrecido una rueda de prensa dentro del paso de testigo que dará, tras dieciocho años, a Jesús Les, nuevo director territorial de la entidad, para analizar la “reestructuración” que está sufriendo Ibercaja.

Preguntado por los visibles cierres de oficinas en Logroño ha señalado que “a nadie se le escapa la crisis financiera” que ha supuesto un “cierre de oficinas” y que “ha afectado a todos los bancos” y cajas.

En el caso de Ibercaja en La Rioja, ha dicho, la “reestructuración” está suponiendo “no tanto el cierre” de oficinas sino pasar a “otro modelo de negocio”.

Así, ha dicho, si hace “seis años un cliente visitaba la oficina de su banco una o dos veces al mes”, ahora “los hábitos de los clientes han cambiado” y optan más por la banca on line, lo que hace que “la presencia de un gran número de oficinas no sea necesaria”.

Tras insistir en que “se puede llegar al cliente de otra manera”, ha indicado que “más que cierre se trata de optimizar”. En Gran Vía de Logroño, ha recordado, Ibercaja llegó a tener tres oficinas, y ahora se han “concentrado” en una.

Otro ejemplo que ha señalado, también en la capital riojana, es que antes Ibercaja tenía oficinas en Pio XII, Colón y San Antón; pero ahora se han “concentrado” las tres en la central de San Antón que, además, en 2018 sufrirá una remodelación.

En cuanto a la Urbana 6 (ubicada en Muro de la Mata, frente al Espolón, y recientemente cerrada al público) ha recordado que fue la primera oficina que se abrió, en el año 1936, y, ahora, se va a “reconvertir” en Centro de Negocio de Empresas, para que suponga un “punto de referencia” a los empresarios gestionada por una plantilla de gerentes de empresa, de seguros...

Por último, ha asegurado que todos estos cambios “no reducirán la plantilla” de Ibercaja en La Rioja. No obstante, sí ha reconocido que la entidad arrastra ya tres ERES que han afectado, por ejemplo, a su persona.

En total, ha aportado, Ibercaja posee cien oficinas en La Rioja y, ha destacado, “no ha cerrado en ninguna localidad”, dado su “compromiso por el medio rural”; aunque no ha negado que “en unos años” se tenga que “reconducir el modelo”.

Actualmente, Ibercaja tiene presencia en ochenta localidades de La Rioja, y cuenta con una plantilla de 220 trabajadores y un volumen de actividad de 4.500 millones de euros, llegando a 140.000 clientes, lo que supone que el 44 por ciento de los riojanos son clientes.