Verano y moscas, un matrimonio mal avenido

Bolsas de agua, vinagre, bolsas aromáticas... los remedios para librarse de las moscas son infinitos y a cada cual más original. Pero, ¿son eficaces. Parece que todavía nadie ha dado con la fórmula magistral para acabar con estos molestos insectos que cada verano nos acompañan. Lo cierto es que el mejor remedio es, para el biólogo Luis Martínez-Zaporta, “aguantarse” y dar por hecho que verano y altas temperaturas equivale a mayor presencia de moscas.

¿Por qué hay más moscas en la época estival?. Martínez-Zaporta lo explica. “Con el calor, se reproducen más deprisa. El desarrollo de sus huevos y sus larvas depende del tiempo, y las altas temperaturas propician un desarrollo más rápido”. Si estamos muy hartos de estos bichos, especialmente en los pueblos y en el campo, podemos usar algunos de los trucos más extendidos, pero este biólogo no recomienda utilizar aquellos con productos químicos.

MOSCAS DE LA FRUTA

A las moscas habituales con las que llevamos conviviendo junio y julio se están empezando a sumar ya las de septiembre, las conocidas como moscas de la fruta. Y es que la disponibilidad de alimento es otro factor para que aparezcan. “En septiembre se recoge más fruta y, además, tiene lugar la vendimia, con lo que puede haber más cantidad de fruta tirada por el suelo en el campo”, detalla.

Estas moscas no son perjudiciales para las cosechas, ya que se alimentan de fruta en descomposición, no de alimentos en crecimiento o maduros, aunque pueden acelerar los procesos de fermentación de la fruta. Por ello, si la fruta no se va a consumir enseguida, sería recomendable mantenerla tapada para que las moscas no se posen en ella.

Para prevenir que aparezcan, Martínez-Zaporta aconseja mantener las ventanas cerradas en las horas más calurosas y, en caso de infestación severa, atraerlas hacia un vaso de agua con un chorro de vinagre y un poco de azúcar. También tener paciencia, estos animales desaparecerán con el frío.