La Rioja, una de las comunidades con mejor calidad ambiental

Greenpeace ha elaborado un ranking para evaluar la situación en la que se encuentran todas las comunidades españolas teniendo en cuenta al análisis de algunos factores como las costas, la pesca, la calidad del aire o la protección y la gestión del territorio y de los residuos.

En él, podemos encontrar a La Rioja y Navarra como las comunidades con mejor calidad ambiental. En el polo opuesto, Cantabria y Aragón, tal y como informan en el diario El Mundo.

Tras el análisis realizado, han encontrado puntos positivos que dejan ver un cambio en lo que al medio ambiente se refiere, como por ejemplo «la apuesta por las energías renovables» que han hecho en el municipio de Rubí (Barcelona), o las mejoras ambientales en la isla canaria de El Hierro. Julio Barea, coautor de dicho informe, considera que «vamos por el buen camino y hay esperanza de cambio» aunque «todas las comunidades tienen un índice de calidad media-baja».

Además, Barea, ha querido destacar el importante papel que juegan los ciudadanos españoles en dicho cambio, «que han creado asociaciones, plataformas y colectivos para combatir los ataques al medio ambiente», destacando las manifestaciones Canarias contra las prospecciones de Repsol o las de Cairn Energy en Baleares.

Por otra parte, el informe también hace reclamo al Gobierno, ya que consideran que “las leyes aprobadas en solitario por el Ejecutivo del Partido Popular desprotegen el medio ambiente y han supuesto un retroceso”.

Según Greenpeace, los ciudadanos están sufriendo las consecuencias de los ataques al medio ambiente. Barea destaca los altos niveles de polución, «en Madrid cada año mueren 2.000 personas de forma prematura debido a la contaminación». Desde la ONG aseguran que la aparición de enfermedades vinculadas a la baja calidad del entorno así como el impacto en la salud de los ciudadanos son las consecuencias más graves.

Ante esto, María José Caballero, directora de Campañas de Greenpeace, “reclama a los políticos que escuchen a los ciudadanos, que son los que sufren las consecuencias de esos ataques al medio ambiente, y apuesten por modelos económicos y sociales respetuosos con él”.