Alcampo compra el edificio de los Ábaco por 3,8 millones
La sociedad inmobiliaria del Grupo Auchán (Immochan) ha cerrado la adquisición de los los multicines Ábaco del centro comercial Parque Rioja por alrededor de 3,8 millones de euros.
Se desconoce si se reanudará el negocio de proyección de películas, de 14 salas y ocho locales comerciales, o si se utilizarán los 9.373 metros cuadrados del recinto para ampliar la galería comercial de Parque Rioja.
Los cines pararon su actividad en 2013 debido a la entrada del Grupo Ábaco en concurso de acreedores, pasando a formar parte de la Sareb (conocida como 'banco malo') y el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), perteneciente a la Generalitat Valenciana.
La Sareb está encargada de la gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria y poseía el 87% del inmueble, mientras que la Generalitat Valenciana, a través del IVF, era propietaria del 13% restante.
El local ha supuesto unos costes que, tan solo para IVF según sus cuentas de 2015, han alcanzado los 14.000 euros.
¿Cómo una comunidad autónoma se convirtió en copropietaria de unos multicines?
El espacio en el centro comercial Parque Rioja es uno de los inmuebles más extraños con los que cuenta el IVF y de los que lleva tiempo tratando de deshacerse. Todo comenzó en 2004, entonces IVF, Banco de Valencia y Bancaja prestaron a la exhibidora valenciana Ábaco 15 millones de euros para equipar dos salas en Alfafar (Valencia) y Sant Vicent del Raspeig (Alicante). Momento en el que la exhibidora utilizó las instalaciones riojanas como garantía de dicho préstamo.
Tras haber sido absorbida por el fondo Mercapital, que entró en el capital con una participación del 80%, luego se unió a Cinebox formando el grupo Ábaco-Cinebox, dando lugar a la creación de una de las mayores exhibidoras del país, con 42 complejos multisala y más de 450 pantallas.
En 2007, mediante la gestión de Mercapital, el grupo entró en concurso de acreedores. Como resultado, se efectuó una quita de la deuda del grupo por un valor de 65,23 millones de euros y se ejecutaron las garantías. De esta manera, la Generalitat Valencia a través de IVF recibió su parte, al igual que la Sareb se hizo con su participación a través de CaixaBank -al que le llegó a través del Banco de Valencia- y de Bankia.
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