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Opinión - Vivir sobre un polvorín. Por Rosa María Artal

Se necesitan 500 euros para pagar el agua

Se necesitan 500 euros para pagar el agua

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Nació como forma de consumo alternativa, para frenar el capitalismo. Pero ahora necesita capital, en concreto, quinientos euros para pagárselos al Ayuntamiento de Logroño. El Centro Cívico Madre de Dios ha conseguido el suministro de agua, tras dos años de protestas, y, ahora, tiene que pagarlo.

Fue en el año 2007 cuando la Iglesia del Convento de Madre de Dios se desacralizó. Aunque el proyecto inicial pasaba por su derrumbe, la plataforma vecinal 'YATQTI?' (y a ti qué te importa) logró paralizarlo. Hoy es sede del Centro Cívico Madre de Dios y, también, de La Tienda Gratis. Durante dos años, diversas iniciativas han luchado porque tuviera agua para cosas tan básicas como utilizar el cuarto de baño, lavarse las manos o limpiar un vaso.

José Ignacio Zuñiga, voluntario del Centro, invita, en este sentido, a pensar en lo que, hasta ahora, suponía estar “horas” atendiendo la Tienda Gratis sin poder usar este servicio. El Convento, además, apunta Sonia Losantos, otra voluntaria, es lugar de talleres, por ejemplo, de cerámica.

“La historia es que se ha conseguido el agua y ahora hay que pagarla”, añade Israel Pérez, también voluntario. Por eso, la Tienda Gratis se transformó el pasado jueves en un mercadillo en el que se encontraban, por ejemplo, cortes de pelo a un euro. En un ambiente festivo, musical, consiguió parte de los fondos que necesita para pagar al Consistorio el contador que ha instalado.

El precio de los peluches, utensilios de cerámica salidos de un taller del Centro Cívico y otros elementos del mercadillo oscilaba entre uno y tres euros. Precios populares que responden al deseo de quienes se acercaban al Convento de Madre de Dios para “echar una mano para que esto pueda funcionar”.

“Es hoy, nada más que hoy”, insiste Zuñiga. Cobrar por lo que se vende rompe la filosofía con la que nació La Tienda Gratis y, así, se trató en una asamblea de la Comisión del Centro Cívico en la que se decidió que, por una vez, se iba a recabar dinero o, si no, no se podía tener agua.

Harán falta más acciones y en ellas se volcarán los diferentes colectivos que conforman la Comisión del Centro Cívico. Ahora, la segunda quincena de agosto, La Tienda Gratis cierra pero el centro cívico seguirá abierto con asambleas, teatro y actividades.

Y en septiembre, vuelve la Tienda Gratis los martes y jueves. Cada día pasan por ella entre doscientas y trescientas personas que responden al llamamiento a un consumo responsable que rompe con el tradicional 'consumir por consumir' y que se basa en que todos tenemos algo que a otro le hace falta.

Otras actividades, de cara al próximo curso escolar, serán talleres de cocina los martes; ganchillo y punto el mismo día; talleres de jabón artesano los primeros jueves de cada mes; clases particulares; reparto de libros de texto de la 'Asamblea de Estudiantes'; y biblioteca.

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