El Haro se complica el ascenso

El Haro deberá remontar en Mieres si quiere jugar en Segunda B la temporada que viene. No sólo eso, tiene que hacer la machada. Difícil, muy difícil. Pero hay que creer en el bloque riojano. En su fe, como demostrara en Ganzábal para sobreponerse a su inferioridad numérica o al resultado cosechado en Pozuelo (0-2) tras el 0-0 de la ida. El duelo de El Mazo se saldó con la derrota de los jarreros por 0-2 frente a un Caudal que sorprendió cuando en la primera acción marcó el tanto. Un gol que condicionó, como es lógico, el devenir de un encuentro de ida de la ronda final de esta interminable fase de ascenso a la división de bronce.

A los de David Ochoa les costó sobreponerse a un gol que dio tranquilidad a un conjunto asturiano muy seguro de sus posibilidades. Los locales fueron sacudiéndose de la presión visitantes con su juego directo en busca de Unai y Leo para a partir de las segundas jugadas tratar de generar peligro y acercarse a Bussman. De esa manera, gracias a varias faltas y a algún que otro córner. Era la manera de pisar área rival. Sin embargo, el conjunto que entrena Iván Ania no se amilanó y buscó el control del juego para sentenciar la eliminatoria. No es muy habitual, en este sentido, que los asturianos lanzaran hasta diez saques de esquina en una primera parte en la que Annunziata elevó demasiado tras un error de Javi Pérez en la elaboración.

Por suerte, no sucedió como en el primer minuto cuando Invernón puso un gran centro para que Javi Sánchez, viniendo en segunda línea y desde el punto de penalti, pusiera por delante a los suyos. El Caudal quería hacer sangre y de nuevo Javi Sánchez gozaba de una oportunidad para ampliar la diferencia. Apenas 21 minutos y el Haro necesitaba creer en algo. Lo hizo cuando Íker remató a bocajarro y el meta alemán evitaba la igualada. Una ocasión que podía cambiar el devenir de la contienda. Al menos hubo más equilibrio, aunque una mano de Txejo, dentro del área, pudo romper de forma definitiva el encuentro. El colegiado no la vio y no pasaba nada una vez superada la media hora.

ADRIANO, AL POSTE

Y como aconteciera con anterioridad, acción-reacción. En este caso fue Adriáno el que se topó con el poste en la mejor opción de los blanquinegros. Con la sensación de haber librado, pero también de haber podido obtener un mejor resultado, el duelo se iba al descanso. La segunda mitad comenzó como la primera, es decir, con ocasión, doble, del Caudal. Javi Pérez cuajó una buena estirada, pero el rechace, de cabeza de Javi Sánchez, se marchó fuera.

Pero a partir de ese momento, el Haro apostó por el empuje, por imprimir velocidad a sus acciones y por llegar lo antes posible a la portería rival. El Caudal, sabedor del gran resultado que llevaba, se tomó el duelo con tranquilidad, y no mostró sus garras, salvo con cuentagotas para dar el mazazo definitivo y acudir a Mieres con los deberes hechos. Unai volvió a poner a prueba a Bussman y si el portero era superado, la zaga asturiana sacaba bajo palos. Parecía que el Caudal sufría, pero el ímpetu de los jarreros se limitó a un córner casi olímpico que impactó en el poste y a acciones en las que faltaba el remate definitivo.

Los asturianos querían lanzar una contra letal y la lograron. Otra vez desde la buena izquierda y en la recta final del encuentro, Quero, el exfutbolista de la UD Logroñés que se marchó a Bolivia y regresó al fútbol nacional de la mano del Caudal, se encargó de prácticamente finiquitar una eliminatoria que se le pone muy cuesta arriba a un Haro que fue mejor en la segunda parte, pero que se encontró con un mazazo a modo de gol en el minuto 89 que encarrila el ascenso del Caudal. Pero que se ande con cuidado, el conjunto asturiano porque el Haro, pese al marcador adverso, buscará la manera de pelear hasta el final por lograr algo épico. Sin duda, de conseguirlo, la machada sería bestial.